Chihuahua.- Es inadmisible que al exgobernador chihuahuense César Duarte se le otorgue criterio de oportunidad para permanecer como testigo protegido, como el presidente Andrés Manuel López Obrador previó, pues si bien al final es decisión de la Federación, el ex mandatario tiene que asumir la responsabilidad que le corresponde.
Así lo expresó la gobernadora del estado, Maru Campos Galvan quien manifestó que aunque la última palabra la tienen las autoridades federales, como la Fiscalía General de la República (FGR), en lo que a ella como ciudadana, sus percepciones personales, su cargo de gobernadora y los miembros del gobierno del Estado concierne, hay una postura en contra. «Otra vez: «ni perdón, ni olvido»», reiteró.
Así mismo, informó que las investigaciones de la Secretaría de la Función Pública (SFP) continúan su curso y confían en su resolución a pesar de que suelen ser asuntos que demoran, tal como le ocurrió a Javier Corral en su mandato.
Lo anterior luego de que se le consultara a Campos Galván su postura sobre el pronunciamiento de AMLO, el pasado lunes donde expresó: “Si se va a conocer sobre complicidades mayores y si se va a recuperar dinero mal habido, estamos de acuerdo con que este mecanismo de protección se implementen en Duarte”.
