Un parto prematuro se considera cuando el embarazo no alcanza las 36 semanas de gestación.
Para evitar nacimientos prematuros, es decir, antes de las 36 semanas de gestación, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua, recomienda a las mujeres embarazadas acudir a control prenatal, de manera mensual y cada vez que sea necesario por urgencia.
Con lo anterior se podrán detectar signos que indiquen riesgos y se conseguirá disminuir la probabilidad de que el nacimiento se adelante.
Así lo dio a conocer, el director del Hospital de Gineco-Obstetricia No. 15, doctor Roque Torres Macías, quien destacó que un embarazo se dice que llega a su término de las 37 a las 41 semanas de gestación; después de este tiempo se debe de intervenir para un nacimiento sin complicaciones.
Indicó que en la semana 28 de gestación, el bebé se encuentra ya completamente formado, pero aún le hace falta crecer, ganar peso y deben de madurar todos sus órganos, especialmente sus pulmones.
El especialista en ginecología y obstetricia explicó que un parto prematuro se considera cuando el embarazo no alcanza las 36 semanas de gestación y por ello requieren de ciertos cuidados especiales.
Advirtió que cuanto más pequeño e inmaduro sea el recién nacido, presenta más riesgos de enfermedades, por lo que es necesario extremar precauciones en su cuidado.
Asimismo, el doctor Torres Macías puntualizó que tras un parto antes del tiempo normal, la expectativa de vida para el niño se va reduciendo; mientras más bajo sea su peso y mayor sea su inmadurez, las secuelas pueden ser de mayor severidad, como son ceguera, sordera, dependencia de oxígeno para respirar de manera permanente, problemas digestivos y/o retraso mental.
Expresó que un niño prematuro es llevado al área de la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), donde es atendido por Médicos Sub Especialistas Neonatólogos y Enfermeras Especialistas en Pediatría, con la más Alta Tecnología en Aparatos Electro- Médicos, y estará bajo vigilancia médica hasta que se estabilicen sus funciones vitales y pueda adaptarse al medio ambiente.
“Los problemas del bebé prematuro se centran en la dificultad para adaptarse al medio ambiente fuera del útero. Por su inmadurez y bajo peso, puede tener dificultades en la regulación de la temperatura corporal y sus sistemas respiratorio, nervioso, digestivo, renal e inmunológico podrían estar comprometidos”, reiteró.
Puntualizó que para no poner en riesgo la salud de los recién nacidos es importante el control prenatal, así como la preparación previa al embarazo, más aún si existen factores de riesgo maternos como diabetes, hipertensión, pacientes renales, cardiópatas, entre otros.
El doctor Torres Macías puntualizó que para tener un correcto control prenatal, hay que acudir a tiempo dentro de las primeras 12 semanas de gestación, posterior a esto, se establece que como un mínimo la mujer debe acudir a cinco consultas de control prenatal, y en caso de urgencia médica.
Algunas recomendaciones que emite el IMSS para evitar nacimientos prematuros son:
Planificar los embarazos.
Acudir a consulta en cuanto se confirme el embarazo.
Tomar ácido fólico antes y durante el embarazo, ya que disminuye el riesgo de malformación en el bebé.
Acudir a las consultas de embarazo y estar atenta a cualquier dato de alarma como hinchazón de pies, manos y cara; dolor de cabeza, zumbido en los oídos, visión borrosa, perdida de la conciencia, convulsiones, dolor o cólico abdominal y salida de líquido o sangre por la vagina.
